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El pueblo indígena Gunayala advirtió sobre el creciente flujo de migrantes sudamericanos en retorno por la costa atlántica de Panamá, lo que está poniendo en riesgo su comunidad ante la falta de infraestructura y servicios. Según su vocero, Anelio Merry, en la última semana han observado un aumento de personas que buscan regresar a Colombia por esta ruta.
Los migrantes evitan cruzar el peligroso Tapón del Darién y llegan a Gunayala en taxis y autobuses para embarcarse en lanchas hacia Colombia. Solo el domingo, al menos 110 personas intentaron partir desde sus puertos rumbo a Necoclí. En un comunicado, la comunidad exigió al Gobierno panameño, a EE.UU. y a organismos internacionales detener el flujo masivo de migrantes en su territorio.
El problema se agravó el sábado cuando una embarcación con 19 migrantes y dos tripulantes naufragó en costas de Gunayala, dejando una menor fallecida.
La comunidad alertó sobre una posible crisis humanitaria y pidió a las autoridades tomar medidas urgentes para evitar más tragedias.
