Una moción judicial podría definir el futuro de cientos de miles de migrantes en EE.UU.
El programa de parole humanitario se ha convertido en una de las vías más rápidas y esperanzadoras para que cientos de miles de migrantes puedan ingresar a Estados Unidos de forma segura y ordenada. Sin embargo, su legalidad ha sido cuestionada desde sus inicios, y ahora, en medio de un litigio federal que enfrenta al gobierno con fiscales republicanos, una nueva moción presentada en una corte de Texas busca frenar los intentos por cancelarlo y preservar los derechos adquiridos por miles de familias.
Esta nota analiza en profundidad la naturaleza del programa, sus antecedentes legales, las cifras oficiales, la polémica que lo rodea y el impacto concreto en la vida de quienes se benefician del mismo.
¿Qué es el parole humanitario?
El parole humanitario es una herramienta migratoria que permite al gobierno de Estados Unidos autorizar el ingreso temporal de personas extranjeras por razones de urgencia humanitaria o beneficio público significativo, aun cuando no cumplan con los requisitos regulares para obtener una visa.
Aunque el parole ha existido desde hace décadas bajo distintas administraciones, el programa tomó especial relevancia en 2022 y 2023, cuando el gobierno de Joe Biden lo implementó como una alternativa migratoria para personas procedentes de Venezuela, Cuba, Haití y Nicaragua, y más adelante lo amplió para otras nacionalidades como Ucrania y Afganistán en circunstancias específicas.
Cronología del parole humanitario 2022–2025
- Octubre 2022: Comienza el parole para venezolanos, con un límite de 24?000 solicitantes al mes.
- Enero 2023: Se amplía el programa para incluir a nacionales de Cuba, Haití y Nicaragua.
- Enero 2023–junio 2024: Más de 387?000 personas fueron admitidas bajo este programa.
- Septiembre 2023: Comienzan las primeras demandas legales impulsadas por fiscales republicanos de Texas y otros estados.
- Junio 2024: La Corte del Distrito Sur de Texas acepta escuchar el caso contra el gobierno.
- Junio 2025: Se presenta una moción clave para detener la demanda y defender la continuidad del programa.
¿Qué busca la nueva moción?
La moción, presentada por organizaciones defensoras de los derechos migrantes y abogados voluntarios que representan a beneficiarios del parole, solicita al juez Drew Tipton que desestime la demanda presentada por fiscales republicanos de Texas y otros estados conservadores.
El argumento central de la moción es que:
- El parole está sustentado legalmente en el Título 8 del Código de EE.UU., Sección 1182(d)(5).
- No representa un abuso de autoridad, ya que cada caso es revisado de manera individual.
- El programa no ha demostrado causar perjuicios económicos ni sociales a los estados demandantes.
Cifras oficiales del parole humanitario
Según datos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), entre enero de 2023 y marzo de 2025:
- Más de 387?000 personas han ingresado a EE.UU. bajo parole.
- Los países con mayor número de aprobaciones son:
- Haití: 140?000+
- Venezuela: 120?000+
- Cuba: 80?000+
- Nicaragua: 47?000+
- Más del 75?% de los beneficiarios han encontrado patrocinadores dentro de los primeros tres meses.
- Al menos un 65?% de los admitidos están empleados en la actualidad.
¿Quiénes están detrás de la demanda?
La demanda principal fue presentada en Texas por el fiscal general republicano Ken Paxton, y respaldada por otros 20 estados conservadores, quienes alegan que el programa:
- Viola la ley federal de inmigración
- Excede las facultades del Poder Ejecutivo
- Impone cargas económicas sobre los estados receptores
- Incentiva la inmigración ilegal
También argumentan que el parole debería ser usado solo en “casos excepcionales”, y no para cientos de miles de personas.
¿Qué consecuencias tendría si el juez elimina el programa?
Si el juez Tipton acepta la demanda y considera ilegal el parole humanitario:
- Cientos de miles de personas perderían el estatus temporal que les permite trabajar, vivir y viajar en EE.UU.
- Nuevas solicitudes serían canceladas o no aceptadas.
- Los beneficiarios podrían pasar a estar “fuera de estatus” una vez vencido su permiso inicial.
- Las familias separadas por razones migratorias no podrían reencontrarse bajo esta vía.
Impacto en la comunidad migrante
La cancelación del parole afectaría directamente a miles de familias que ya se encuentran dentro del país, especialmente en comunidades con alta población venezolana, cubana y haitiana como:
- Miami y Orlando (Florida)
- Nueva York y Nueva Jersey
- Houston, Dallas, San Antonio (Texas)
- Los Ángeles y San Diego (California)
- Chicago (Illinois)
Muchos de estos migrantes ya están trabajando legalmente, pagando impuestos y enviando remesas a sus países de origen. Además, tienen hijos menores nacidos en EE.UU. o que asisten a escuelas locales.
Reacciones de defensores migrantes
Organizaciones como America’s Voice, FWD.us, Alianza Americas y Catholic Charities han manifestado su apoyo a la moción reciente. Señalan que el parole:
- Evita la saturación de la frontera sur
- Canaliza los procesos migratorios hacia vías legales
- Reduce el número de cruces irregulares
- Fortalece la reunificación familiar
- Fomenta la integración social
Además, insisten en que criminalizar o politizar este mecanismo humanitario solo agrava la crisis migratoria.
¿Quién decide ahora?
El caso se encuentra en manos del juez Drew Tipton, del Tribunal de Distrito Sur de Texas. Tipton ya ha emitido fallos anteriores en contra de políticas migratorias de la administración Biden, por lo que se considera una figura crítica en el futuro del programa.
Cualquiera sea su decisión, es probable que la parte perdedora apele al Quinto Circuito de Apelaciones y luego a la Corte Suprema, lo que prolongaría el litigio por varios meses más.
¿Qué pueden hacer los beneficiarios mientras tanto?
Mientras el litigio sigue su curso, el parole humanitario sigue vigente y se recomienda:
- No abandonar EE.UU. sin permiso previo
- Mantener dirección y datos actualizados con USCIS
- Renovar el permiso de trabajo a tiempo
- Consultar abogados de inmigración si su estatus va a vencer
- Estar atentos a actualizaciones oficiales del DHS o USCIS
¿Qué es un “patrocinador” y por qué es clave?
El éxito del programa depende de los patrocinadores (sponsors), ciudadanos o residentes legales que se comprometen a:
- Brindar apoyo económico al beneficiario
- Garantizar un lugar seguro donde vivir
- Firmar el formulario I?134A de declaración de respaldo
- Asistir en el proceso de integración (idioma, trámites, empleo)
Sin un patrocinador, el solicitante no puede ser considerado elegible para el parole humanitario.
¿Qué propone la moción presentada?
La moción reciente busca que el juez:
- Reconozca que los estados demandantes no han demostrado daños directos
- Confirme que el parole es legal cuando se aplica caso por caso
- Desestime la demanda por falta de fundamento
- Permita que el programa siga funcionando sin restricciones
Además, se adjuntan declaraciones juradas de beneficiarios reales, estadísticas, informes económicos y estudios de impacto social.
¿Y si cambia el gobierno en 2025?
Las elecciones presidenciales de noviembre de 2025 podrían definir el destino del parole. Candidatos republicanos como Donald Trump han prometido terminar con el parole humanitario y restringir aún más la inmigración.
Una victoria republicana podría llevar a:
- Cancelación del programa por decreto
- Restricciones adicionales en permisos de trabajo
- Más detenciones y deportaciones para quienes queden fuera de estatus
El parole humanitario no es una solución mágica, pero representa una vía legal, segura y ordenada para quienes huyen de dictaduras, violencia, pobreza extrema o colapsos económicos. Es también una herramienta de humanidad en medio de un sistema migratorio saturado y una frontera en crisis.
La moción introducida en junio de 2025 busca defender esta vía legal ante una amenaza judicial que podría cerrar las puertas a cientos de miles de personas que ya están construyendo sus vidas en EE.UU.
Mientras se define su futuro en los tribunales, queda claro que el parole no solo impacta a migrantes, sino también a las comunidades, empleadores, iglesias, escuelas y familias estadounidenses que los han acogido.
Ysabel Chópite