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El “zar de la frontera” de Estados Unidos, Tom Homan, expresó su descontento con el ritmo actual de arrestos de migrantes indocumentados y afirmó que se redoblarán esfuerzos para incrementar las detenciones. Desde que Donald Trump asumió la presidencia en enero, se han arrestado 14.000 migrantes, de los cuales muchos han sido deportados y otros enviados a la base naval de Guantánamo.
Homan aseguró en una entrevista con CNN que, aunque la cifra de deportaciones supera la de la administración anterior, “aún queda mucho por hacer”. Las autoridades han priorizado la detención de migrantes con antecedentes penales, pero advierten que cualquier persona sin documentación puede ser arrestada. La Casa Blanca estima que hay 11 millones de inmigrantes irregulares en el país, y Trump prometió durante su campaña localizar y expulsar a millones de ellos.
Para cumplir este objetivo, el gobierno ha reforzado las operaciones con personal de diversas agencias de seguridad. En enero, las detenciones diarias llegaron a 1.179 en su punto más alto, pero en febrero cayeron a menos de 600 por día. La meta establecida por la administración es alcanzar entre 1.200 y 1.500 arrestos diarios, un desafío que Homan reconoce como “difícil pero necesario”.
