EE.UU. se niega a repatriar a salvadoreño deportado
La Casa Blanca aseguró que no facilitará el regreso de Kilmar Ábrego García a Estados Unidos, a pesar de la orden judicial que exige su retorno. El salvadoreño fue deportado por error y enviado a una megacárcel en su país, pero las autoridades estadounidenses sostienen que debe enfrentarse a la justicia salvadoreña. Washington lo señala como miembro de la MS-13 y acusado de trata de personas, aunque no tiene antecedentes penales ni ha sido procesado en suelo estadounidense.
La portavoz presidencial Karoline Leavitt calificó a Ábrego García como “terrorista extranjero” y justificó su expulsión bajo una norma de 1798 conocida como la Ley de Enemigos Extranjeros. Esta legislación fue usada el pasado 15 de marzo para deportar a más de 250 personas, entre ellos 23 salvadoreños, pese a medidas judiciales que protegían a algunos de ellos. El Tribunal Supremo estadounidense falló posteriormente en contra de la deportación de Ábrego, pero el gobierno se niega a cumplir con la orden.
El presidente Donald Trump y su homólogo salvadoreño, Nayib Bukele, acordaron mantener la decisión durante una reunión en la Casa Blanca. Bukele afirmó que no tiene intención de liberar a quien describió como “terrorista”, aunque reconoció tener competencias para hacerlo. Desde Washington, la Administración Trump defendió que Estados Unidos no debe dictar lo que El Salvador hace con sus propios ciudadanos y descartó reconsiderar la medida.
