Indianápolis Colts refuerza su ataque aéreo
Los Indianapolis Colts utilizaron su selección de primera ronda en el Draft de la NFL para reforzar una de sus mayores debilidades ofensivas: la posición de ala cerrada. Con la selección global decimocuarta, el equipo eligió a Tyler Warren, estrella de Penn State, All-American y reciente ganador del Premio Mackey a la mejor ala cerrada del país. Con 1,95 metros y 115 kilos, Warren ofrece tamaño, versatilidad y manos confiables, cualidades que los Colts llevaban años buscando para apuntalar su juego aéreo.
La decisión surgió a algunos analistas, que proyectaban a Warren saliendo antes del turno de Indianápolis, y daban por hecho que el equipo terminaría seleccionando a Colston Loveland, quien finalmente fue a los Bears en el puesto 10. Sin embargo, el draft favoreció a los Colts, que vieron cómo equipos como los Jets y Cowboys se inclinaban por reforzar otras posiciones. Al momento del anuncio de Roger Goodell, los aficionados celebraron una elección que parecía improbable horas antes: Warren, aún disponible y en camino a Indianápolis.
El gerente general Chris Ballard y el entrenador Shane Steichen coincidieron en que Warren encaja perfectamente con sus planos ofensivos. Destacaron su capacidad para jugar múltiples roles, desde bloqueador hasta receptor en la ranura o incluso como mariscal en formaciones Wildcat. Ballard elogió especialmente sus manos, su capacidad para jugar los tres downs y su actuación dominante contra USC, donde atrapó 17 pases para 224 yardas. “Es único, y es el tipo de jugador que transforma una ofensiva”, sentenció Ballard, quien confía en que Warren será una pieza clave para apoyar al mariscal titular, ya sea Anthony Richardson o Daniel Jones.
