Elon Musk apuesta a que los robots humanoides serán la próxima gran revolución tecnológica, con un potencial de mercado de US$ 10 billones. Sin embargo, China avanza rápidamente en esta carrera, como lo demostró con la espectacular presentación de sus humanoides en la gala del Año Nuevo Lunar, vista por más de mil millones de personas.
Videos de robots chinos realizando movimientos complejos, como volteretas y paseos en bicicleta, han inundado las redes en los últimos meses, reforzando el impulso del país asiático en esta industria.
Si bien el desarrollo aún está en sus primeras etapas, las grandes tecnológicas ya están apostando fuerte. Empresas como Microsoft, Nvidia y Jeff Bezos han invertido en Figure AI, mientras que Meta planea sumarse a la competencia.
Tesla, por su parte, presentó su prototipo de Optimus en 2022 y Musk sostiene que estos robots serán tan comunes como los automóviles o los teléfonos móviles en el futuro.
Goldman Sachs estima que el mercado de humanoides alcanzará los US$ 38.000 millones para 2035, con envíos de un millón de unidades anuales en la próxima década.
China, que domina el sector de los robots industriales, busca ahora liderar el de humanoides. Aunque sus empresas entraron tarde en la carrera, han reducido la brecha con sus rivales de EE. UU. gracias a la optimización de costos y producción.
Con un fuerte respaldo gubernamental, Beijing quiere replicar su éxito en el mercado de vehículos eléctricos y consolidarse como una potencia tecnológica en robótica, desafiando la primacía de Tesla y otras firmas occidentales.