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El presidente Donald Trump anunció este miércoles que su gobierno está preparando una orden ejecutiva para habilitar la prisión militar de Guantánamo como centro de detención para 30,000 inmigrantes indocumentados con antecedentes criminales.
“Mucha gente ni lo sabe, tenemos 30,000 camas en Guantánamo para detener a los peores extranjeros ilegales criminales que amenazan a los estadounidenses”, afirmó Trump durante la firma de la ley migratoria Laken Riley. “Algunos son tan malos que ni siquiera podemos confiar en que los países los acojan. Así que los vamos a enviar a Guantánamo. Es un lugar duro para escapar”.
Horas antes, la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, adelantó en una entrevista con Fox News que el gobierno evalúa esta medida como parte de su estrategia migratoria.
“El presidente está evaluando todas las opciones para expulsar a las personas que están ilegalmente en Estados Unidos, en particular a aquellos de países que no aceptan deportados, como Venezuela y Cuba”, explicó Noem.
La prisión de Guantánamo, ubicada en una base naval estadounidense en Cuba, fue utilizada después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 para albergar a sospechosos de terrorismo, muchos de los cuales pasaron años detenidos sin juicio. Además, el gobierno del expresidente Joe Biden empleó instalaciones en la base para procesar a solicitantes de asilo.
Con esta nueva medida, la administración Trump busca doblar la capacidad de detención de inmigrantes criminales, alineándose con su política de deportaciones masivas.